La época de reactivación representa un reto en muchos ámbitos de la vida cotidiana. Volver al trabajo, a la vida social, compras presenciales y no menos importante, volver a ejercitarse en los espacios a los que estábamos acostumbrados.

Durante los tiempos de confinamiento, el ejercicio indoor fue la opción más viable y la única posible. Sin embargo, esto pudo significar una disminución en la actividad física o cambios drásticos de hábitos en nuestras rutinas de entrenamiento, llevándonos a perder resistencia o fuerza y aminorando notablemente nuestra disciplina para hacer ejercicio.

La reactivación es difícil, pero sin lugar a dudas algo totalmente posible. Simplemente hay que tener muy claro los elementos que nos van a ayudar a lograrlo y enfocarnos, para no perder el rumbo. Entre tantas variables que podemos encontrar, una combinación perfecta es volver a descubrir esa motivación, soportada por un compañero de entrenamiento que nos dé la talla en el proceso.

RETOMANDO LA MOTIVACIÓN

Sin duda uno de los motores que nos mueve hacia una disciplina fortalecida es la consecución de logros y el progreso que vemos con los resultados. “Trust the process”, es un lema con el que nos cruzamos frecuentemente. Y precisamente este modo de pensar es el que nos llevará a la constancia que necesitamos. Estas son 7 prácticas que te ayudarán a retomar esa fuerza poderosa como lo es la motivación:

  1. Empieza por realizar nuevamente aquellas actividades físicas que más disfrutas.
  2. Traza objetivos pequeños y asegúrate de alcanzarlos poco a poco, paso a paso.
  3. Evalúa tu desempeño, analiza tu progreso y define nuevas metas.
  4. Reconócete los logros y prémiate por ellos.
  5. Sé paciente, respeta el proceso y sé amable contigo mismo.
  6. Descansa cuando sea necesario y permite que tu cuerpo se recupere a su debido tiempo.
  7. Encuentra las herramientas adecuadas que te guíen en el proceso.

Es totalmente normal que la aplicación de las buenas prácticas sea fluctuante. Habrán picos de motivación, pero lo más importante es reconocer cuando debamos fortalecernos en un campo en específico e ir reconstruyendo ese atleta que se quedó rezagado durante los tiempos pandémicos.

ENCUENTRA EL APOYO PRECISO

La precisión es clave para poder medirnos en nuestros procesos de actividad física.  La importancia de un gadget que nos indique cómo vamos en este momento y hacia qué horizonte debemos dirigirnos es un pilar fundamental para mantener esa motivación que buscamos.

Con Polar vamos más allá. Además de tener un dispositivo con tecnología avanzada, tenemos la posibilidad de portar un entrenador que lo mide prácticamente todo. Sólo basta con mirar algunos de los modelos protagonistas de la marca, como lo es el Polar Vantage V2, un monitor multideporte Premium ligero, caracterizado por materiales de primera como su carcasa de aluminio y las cómodas correas de silicón. Este partner estará listo para cualquier reto. Es un dispositivo que ufana su diseño ligero vestible para cualquier ocasión. Te ayudará a definir si debes incrementar o disminuir tu esfuerzo, notificando cuando tu cuerpo esté totalmente recuperado y listo para seguir luchando por tus objetivos.

Si tus retos de reactivación los llevas inmediatamente al duro campo de la aventura extrema, el Polar Grit es ese compañero que te escoltará en el proceso. Este dispositivo cuenta con la certificación MIL-STD-810G, aprobación militar de resistencia a factores como temperaturas extremas, caídas y humedad. Aunque su diseño sea robusto, con sus 64 gramos se logra resaltar la comodidad de los monitores inteligentes Polar. Con su batería de alta durabilidad, te podrás asegurar que este compañero estará contigo hasta que hayas logrado retomar esa motivación que tanto anhelas.

Recuerda no dejar de lado los demás elementos que te ayudarán en este camino a la reactivación. Comer bien, dormir adecuadamente y recuperar tus músculos son elementos que un Polar Ignite sabrá cómo gestionar. Sus aplicaciones serán tu faro y la data que podrás tomar del dispositivo hará muy eficiente el proceso. Tu centro de comando, el Polar Flow, te mostrará ese análisis que buscas para reactivarte adecuadamente.

Sí, retomar es difícil, pero las herramientas que tenemos a la mano hacen del camino algo no sólo altamente posible, sino un proceso que podrás ajustar a tu medida para disfrutarlo y gozártelo. Algo que siempre lograrás con un entrenador Polar en tu muñeca.